En Ecuador, todos los juegos de azar, incluidos los casinos y las casas de apuestas, fueron prohibidos tras una consulta popular realizada el 7 de mayo de 2011 y formalizados mediante el Decreto Ejecutivo No. 873. Este decreto ordenó el cierre de dichos establecimientos, permitiendo únicamente que los ya registrados en hoteles de lujo operaran durante un período de transición limitado (1).
La prohibición se codificó posteriormente en el Código Penal: el artículo 236 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) sanciona a quien administre o establezca casinos, salas de juego, casas de apuestas o actividades similares, ya sea de forma física o digital, con penas de prisión de uno a tres años (2).
"Las actividades de pronóstico deportivo no habilitan a la prestación de servicios de juegos de azar tales como casinos, bingos, loterías o apuestas en general, ya sea físicamente, por medios digitales o por cualquier otro medio, las cuales están prohibidas por el artículo 236 del Código Orgánico Integral Penal y por pronunciamiento popular en la pregunta 7 de la Consulta Popular celebrada el 7 de mayo de 2011." (2)
Fallos posteriores, incluida una decisión de diciembre de 2023 emitida por la Corte Constitucional, han confirmado que el pronóstico deportivo cae dentro de la misma categoría prohibida, sin dejar ninguna vía legal clara para los operadores de apuestas deportivas comerciales bajo la legislación ecuatoriana actual (2).
En consecuencia, la mayoría de las formas de apuestas deportivas siguen siendo ilegales en Ecuador, y tanto los operadores como los participantes se arriesgan a sanciones penales. Aún no se ha promulgado una regulación o licenciamiento integral para las apuestas deportivas, por lo que cualquier interesado debe esperar una orientación legislativa o reglamentaria explícita.
Source:
https://www.turismo.gob.ec/wp-content/uploads/2016/04/REGLAMENTO-DE-JUEGOS-DE-AZAR-PRACTICADOS-EN.pdf
https://www.corteconstitucional.gob.ec/
Última actualización: 22-05-2025 Aviso: Este artículo no proporciona asesoramiento legal. Si necesita asesoramiento legal, comuníquese directamente con un abogado.
